El Gobierno y la Compañía de Minas Buenaventura han firmado un contrato para la ejecución del proyecto hídrico minero El Algarrobo, ubicado en el centro poblado Locuto,
Tambogrande.
Este proyecto busca garantizar el acceso al agua para la población local y fomentar nuevas inversiones mineras. Con una inversión de 2,753 millones de dólares, El Algarrobo promete ser un modelo para futuras iniciativas en regiones donde el recurso hídrico ha sido un obstáculo para el desarrollo minero.
¿En qué consiste el proyecto hídrico minero El Algarrobo?
El contrato firmado entre el Ministerio de Economía y Finanzas, a través de ProInversión, y la Compañía de Minas Buenaventura establece la transferencia de concesiones mineras para el desarrollo de este proyecto. La primera etapa se enfocará en identificar fuentes de agua que mejoren el abastecimiento para la población y las actividades productivas en Locuto y sus ocho anexos.
¿Qué beneficios y desafíos traerá el proyecto?
El Algarrobo no solo proporcionará agua potable a la comunidad, sino que también contribuirá a la reactivación económica de la zona. Sin embargo, su ejecución depende del acuerdo social entre la empresa y las comunidades campesinas, garantizando la sostenibilidad del proyecto.
¿Qué reacciones provocó en Tambogrande?
La opinión de la población está dividida. Algunos líderes comunales ven la iniciativa como una oportunidad para mejorar sus condiciones de vida, mientras que otros temen que afecte la agricultura y han anunciado protestas en contra del proyecto.
¿Un modelo a replicar en otras regiones?
El ministro de Economía y Finanzas, José Salardi, destacó que este proyecto podría servir de ejemplo para otras zonas donde la falta de agua ha sido utilizada como argumento para frenar inversiones mineras.