DE PELÍCULA. Así fue el rescate de Paulo Ademhir Huansi Loayza, el empresario cevichero de San Juan de Lurigancho que fue secuestrado por extorsionadores, que le exigían 500 mil soles por cupos, hace casi una semana.
Gracias a un trabajo articulado de la División de Secuestros de la Dirincri, los efectivos del orden llegaron hasta un inmueble de San Martín de Porres. Allí, en una habitación que tenía la puerta tapeada con una sábana, encontraron al empresario tirado en el suelo, maniatado, con la camisa llena de sangre y signos de tortura.
“Me da un poco de miedo el tema de las represalias, esa gente conoce a mi familia”, dijo la víctima al ser rescatado, mientras la Policía le daba tranquilidad.
Paulo Huansi salió del inmueble donde lo mantenían retenido y se reencontró con sus hermanos, quienes lloraron de la emoción y agradecieron a las autoridades. “Mi hermano vuelve a la vida gracias a la División de Secuestros de la Dirincri”, expresó uno de ellos.
La vivienda donde mantenían secuestrado al empresario está ubicada en San Juan de Salinas, en San Martín de Porres. Las dueñas comentan que durante todo este tiempo no vieron nada extraño en la vivienda. “Hacía su vida normal, salía a trabajar a las 7 de la mañana y regresaba a las ocho de la noche. No hacía amistades con nadie”, dijo sobre uno de los secuestradores.
Cabe indicar que según América Noticias, durante el día no había nadie en el lugar, pero dejaban los parlantes sonando todo el día para ocultar el ruido que hacía la víctima quejándose de dolor o pidiendo ayuda.
Según la Policía, el empresario solo recibía arepas una vez al día un poco poco de agua de vez en cuando. Le habían inferido algunos cortes en los brazos y un perro bulldog lo custodiaba. En el momento del rescate, uno de los secuestradores se arrojó por la ventana del segundo piso pero pudo ser detenido.
Quienes custodiaban la habitación eran dos venezolanos, pero lograron intervenir a 4 extranjeros.