Neymar confirma su infidelidad y escribe una carta a su novia

Después de conocerse que Neymar y su pareja, Bruna Biancardi, tienen un acuerdo firmado por el que el futbolista puede mantener relaciones sexuales con otras mujeres si cumple una serie de condicionantes, el brasileño ha sorprendido en su cuenta de Instagram pidiéndole perdón a su novia por una supuesta infidelidad que ha salido a la luz en Brasil. En un mensaje en su cuenta en Instagram dirigido a Bruna, que está con cinco meses de embarazo, la estrella de la Canarinha le pidió disculpas a su compañera y a su familia, así como al hijo que esperan, por el sufrimiento que causó y por la «exposición innecesaria». «Percibí cuánto fuiste expuesta, cuánto sufriste con todo esto y cuánto quieres estar a mi lado. Y yo a tu lado. Me equivoqué. Me equivoqué con ustedes», afirmó el delantero. La polémica se conoció a finales de la semana pasada. Según varios medios de comunicación del país natal del jugador del PSG, Neymar estuvo el 11 de junio con la bloguera Fernanda Campos en un lujoso apartamento. Según Metropoles, las conversaciones entre ambos comenzaron durante el Mundial de Qatar, un momento en el que Neymar y Biancardi estaban atravesando por una crisis de pareja que les había alejado momentáneamente. ¿En qué consiste la cláusula de infidelidad de Neymar con su pareja Bruna? Según informaron, el brasileño y la futura madre de su hijo establecieron tres cláusulas con el objetivo de que Neymar pueda ser infiel, con la única condición que el delantero parisino no pueda saltarse ninguna de ellas. El medio brasileño señaló que Neymar puede tener relaciones sexuales con otras mujeres. «El jugador del PSG tiene libertad de ligar e incluso tener sexo con otras mujeres”, refieren. Además, el exjugador del FC Barcelona y Santos está «obligado a utilizar preservativos durante sus encuentros íntimos con el objetivo de no tener ‘sustos’ en el futuro». Pero eso no es todo, pues también Neymar «tiene prohibido besarse en la boca con otras mujeres que no sean su pareja». Y la última es que el «brasileño está obligado a ser discreto en sus citas».