El Congreso aprobó la ley para proteger a transportistas y empresas afectadas por delitos de extorsión y sicariato, dos de los problemas que más golpean al sector. La Ley N.º 32490, publicada en el diario oficial El Peruano, busca garantizar la seguridad y continuidad del servicio de transporte público y de carga en todo el país.
La norma dispone acciones preventivas, financieras y operativas para reducir los riesgos de la delincuencia. Además, busca recuperar la estabilidad económica de las empresas afectadas, fortaleciendo la respuesta de las autoridades ante las mafias que exigen pagos ilegales o “cupos”.































































































