Iván Prado Barreto, actual gerente de Energía y Minas del Gobierno Regional de Arequipa, está en el centro de una controversia tras ser señalado por presuntamente utilizar fondos públicos para asistir a un prostíbulo en el distrito de Chala, provincia de Caravelí. Según denuncias, el dinero estaba destinado a gestionar un conflicto minero relacionado con la empresa Nemerlin.
Videos y fotografías difundidos en redes sociales muestran a un hombre con características físicas similares a Prado movilizándose desde una pollería en Chala hacia un local nocturno conocido como Las Muñecas, donde se ofrecen servicios sexuales. Este hecho ha provocado una ola de indignación entre la ciudadanía, mientras el conflicto minero en la región sigue sin resolverse.
¿Cómo ha respondido Iván Prado a las acusaciones?
El funcionario negó rotundamente las acusaciones, atribuyéndolas al uso de Inteligencia Artificial para manipular las imágenes;
“Es imposible que haya actuado de esa manera. Jamás expondría mi carrera en una misión oficial. Todo esto es parte de una campaña de desprestigio, probablemente orquestada por mineros ilegales que buscan perjudicar mi gestión”, declaró Prado.
Asimismo, aseguró que, de comprobarse su presencia en el local, renunciaría de inmediato al cargo y anunció medidas legales contra quienes lo acusan.
¿Qué sucede con el conflicto minero en Cahuacho?
El conflicto minero en el distrito de Cahuacho, provincia de Caravelí, lleva meses sin solución. Este enfrentamiento involucra a pobladores, mineros ilegales y la empresa minera Nemerlin. La situación ha escalado, con denuncias recientes de agresiones y secuestros.
Katherine Quispe Mendoza, asesora legal de Nemerlin, señaló que un grupo de 20 personas intentó agredir y secuestrar a seis trabajadores de la empresa:
“Hemos presentado denuncias por intento de homicidio y secuestro. Los atacantes no quieren permitirnos trabajar porque operan de manera informal y no cumplen con las regulaciones legales”, explicó.
Quispe también acusó al alcalde de Cahuacho, José Neira Rospigliosi, de instigar los bloqueos de carreteras durante protestas de mineros artesanales, lo que dificultó las operaciones de Nemerlin.
¿Cuál es el impacto de estas denuncias en la gestión regional?
Mientras se espera una investigación oficial sobre las acusaciones contra Iván Prado, este escándalo ha puesto en evidencia una presunta falta de compromiso en la resolución del conflicto minero y el uso indebido de recursos públicos. La población exige sanciones ejemplares para los responsables y una pronta solución a los problemas en la región.