Cada 23 de julio se celebra el Día de la Fuerza Aérea del Perú con la finalidad de rememorar la gran labor que cumple esa gran institución armada, asimismo, conmemora el 81° aniversario de la inmolación que hizo el “Patrono de los Aviadores Militares”.
José Abelardo Quiñones fue un aviador lambayecano que nació el 22 de abril de 1914. En esta fecha recordamos la enorme labor que hizo al atacar un puesto de combate tras la Batalla de Zarumilla.
El joven aviador pertenecía a la 41° Escuadrilla, que piloteaba 4 aviones North American NA-50, y tal día tenían encargado hacer maniobras de apoyo para recuperar la frontera.
Al realizar el bombardeo en el puesto de Ecuador, la nave de nuestro héroe fue impactada por las baterías antiaéreas. Fue en ese momento donde José envuelto en llamas, decidió dirigir su aeronave contra la artillería enemiga y pese a que el joven piloto pudo salvar su vida lanzándose en un paracaídas, decidió ofrendarla al Perú, su patria que lo vio nacer.
El 16 de mayo de 1966, Abelardo Quiñones fue reconocido como Héroe Nacional de la Aviación a través de la Ley 16126, ascendiéndose póstumamente del grado de capitán de la Fuerza Aérea del Perú.