El Ministerio Público denegó el pedido de Elena Iparraguirre, la terrorista que había solicitado que se le entregue el cuerpo del cabecilla de Sendero Luminoso Abimael Guzmán Reinoso, quien perdió la vida el sábado 11, en su celda de la Base Naval.
Según la Fiscalía, el fiscal Vladimir Farfán Kehuarucho negó el pedido de Iparraguirre tras ponderar el Orden Público e interés social. Además, se informó que los restos del genocida permanecerán en custodia fiscal hasta que finalice la investigación.
Es importante mencionar que, ante la ausencia de una regulación específica sobre la disposición final de cadáveres cuya entrega o actos funerarios podrían significar un riesgo para la sociedad, la fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, presentó el martes una iniciativa legislativa que modifica el artículo 114 de la Ley General de Salud, facultando a jueces y fiscales a tomar una decisión sobre ese tema.
De acuerdo con el proyecto de ley, «el juez o el fiscal, según sea el caso, en decisión especialmente fundamentada, podrá disponer del destino final de los cadáveres, cuyo traslado, funerales o inhumación pudieran poner en grave riesgo la seguridad o el orden público».
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