La presidenta
Dina Boluarte reafirmó su postura sobre la pena de muerte, calificándola como un «acto de responsabilidad histórica» y no una «cortina de humo». Durante la presentación del programa Obras por Impuestos-Alianza por la Seguridad en Palacio de Gobierno, instó a la clase política a debatir seriamente su aplicación como castigo para sicarios y otros criminales.
¿Qué argumentos defiende la mandataria para la pena de muerte?
Ante empresarios y autoridades, Boluarte sostuvo que quienes cometen asesinatos o violaciones contra menores y mujeres indefensas no tienen posibilidad de reinserción social. Según su discurso, la medida busca proteger la vida de los más de 35 millones de peruanos y no pretende desviar la atención de otros problemas del país:
«Solo con valentía y energía se construye la historia», afirmó.
Obras por impuestos: ¿Un plan para mejorar la seguridad?
En paralelo a su propuesta, la presidenta resaltó la importancia de las inversiones en infraestructura penitenciaria y seguridad ciudadana. Dentro del programa de Obras por Impuestos-Alianza por la Seguridad, mencionó 47 proyectos clave, como la construcción del penal de Cusco, la modernización de Lurigancho y Ancón I, la ampliación del penal de Challapalca, y la implementación de sistemas de videovigilancia y tecnologías para la investigación criminal.
¿Cómo percibe la población la gestión de la seguridad?
A pesar de las declaraciones optimistas de la mandataria, la percepción ciudadana es diferente. Una encuesta de Ipsos reveló que el 56% de los peruanos considera a Boluarte responsable del aumento de la inseguridad en el país. Además, el Sinadef reportó 459 homicidios en lo que va del año, evidenciando un grave problema de criminalidad.
Boluarte defendió su gobierno asegurando que «el Perú está creciendo» y que la economía se mantiene estable. Destacó que su gestión está logrando más avances que administraciones anteriores y prometió presentar resultados concretos en breve.