Familiares, amigos y vecinos del pequeño
Ángel Enrique Salazar Idme, de 9 años, protestaron en la Corte Superior de Justicia de
Arequipa, luego de enterarse que,
Reynaldo Puma Atanacio (31), quién atropelló y mató al infante mientras manejaba en estado de ebriedad y sin licencia de conducir, enfrentará el proceso en
libertad bajo comparecencia con restricciones.
Con gritos de «¡Justicia para Ángel!» y «¡Que no quede impune!», la comunidad exige que se imponga prisión preventiva al responsable. Y que la muerte del menor no quede sin castigo.
La familia cuestiona la decisión judicial
Arely Salazar, hermana de Ángel, expresó su frustración y tristeza frente a la decisión de la jueza Lidia Nathalia García Paco:
«
Mi hermano era un niño apenas, tenía una vida por delante. Cursaba el cuarto grado de primaria. El dosaje etílico ha salido positivo con 1.68 por litro de sangre. Cómo le van a dar libertad, se puede dar a la fuga y sigue manejando sin licencia«, reclamó.
La jueza determinó que el fiscal a cargo, Carlos Alberto Mamani Sánchez, no presentó pruebas suficientes para justificar la prisión preventiva de Puma. Sin embargo, los familiares insisten en que la gravedad del caso y la muerte del menor deberían ser motivos contundentes para tomar medidas preventivas:
“¡Pero qué más pruebas quiere si mi hermano está muerto!”, exclamó con frustración.
¿Qué paso con el pequeño Ángel?
El trágico accidente ocurrió el 30 de octubre, alrededor de las 7:00 p.m., en la Asociación San Jerónimo, distrito de Mariano Melgar. Ángel estaba en su bicicleta cerca de su casa cuando fue embestido. Testigos señalaron que el conductor intentó huir del lugar, pero fue retenido por los vecinos hasta la llegada de la policía. Aunque el menor fue trasladado al Hospital Honorio Delgado Espinoza, ingresó sin signos vitales por la gravedad de las heridas.